Cara de Culpable, irresistibles, ¿No es tieno?

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Cara de Culpable, irresistibles, ¿No es tieno?

27 julio 2017 Noticias 0

Cara de Culpable, irresistibles, ¿No es tieno?

¿Mito o Realidad?

«Un estudio sugiere que la mirada expresiva de los perros es sólo imaginación de los humanos.»
Los perros suelen romper las plantas, zapatos y todo objeto que les resulte atractivo, más aún si son cachorros. Los propietarios suelen decir que pueden entender las expresiones de sus mascotas.
En especial los ojos de culpa que tienen cuando han hecho algo malo.
Pero investigadores del Barnard College de Nueva York convencieron a algunos propietarios de que sus perros habían hecho alguna travesura cuando no era cierto.
Mientras ellos (los porpietarios) seguían afirmando que podían ver la expresión de culpabilidad.
El estudio reveló que la expresión no tiene relación con el comportamiento de los animales.
Descubrieron, que la creencia de los propietarios de que pueden interpretar el lenguaje corporal de los perros a menudo es totalmente infundada.
Cara de Culpable ¿Mito o Realidad?

Los investigadores descubrieron que los humanos proyectamos nuestras emociones en los perros.

Mirada de culpa

El estudio realizado por la bióloga Alexandra Horowitz, del Barnard College de Nueva York, en Estados Unidos, demostró que la clásica mirada culpable de un perro no indica si realmente el animal se ha comportado mal, simplemente se trata de una reacción ante los reproches que le hace su dueño.

La investigación «Conocimiento y Comportamiento Canino» indagó en cómo los dueños de perros interpretaban las expresiones de los animales cuando creían que habían comido algo y prohibido para ellos.

Cara de Culpable ¿Mito o Realidad?

La clásica mirada culpable de un perro no indica si realmente el animal se ha comportado mal.

El estudio realizado

Durante la investigación, se realizó un experimento, donde los propietarios de los perros le ordenaros a sus mascotas que no tocaran la comida que habían colocado en una habitación. Después de que sus dueños salieron de la sala, a un grupo de perros se les dio la comida, y a otros, no.

En una serie de pruebas, se les dio a los dueños unas veces información correcta y otras falsa sobre si los perros habían comido o no.

El resultado: los perros que fueron reprendidos mostraron, a juicio de sus dueños, una mirada inequívocamente culpable, no importando si habían comido el alimento prohibido o si ni siquiera lo habían probado.

Pero el estudio, publicado en la revista Behavioural Processes, encontró que las apreciaciones de si sus perros parecían culpables -o no- no guardaban relación con el hecho de que el perro hubiera comido.

Cuando dijeron a los dueños que el perro había cometido la travesura, ellos afirmaron que veían la expresión de culpa, incluso cuando el perro no había hecho nada malo.

Además se observó que cuando había algún cambio en el semblante de los perros era reflejo de las emociones de los humanos.

Cara de Culpable ¿Mito o Realidad?

Cuando había algún cambio en el semblante de los perros era reflejo de las emociones de los humanos.

Si un dueño creía que su perro se había comportado mal y lo reprendía, algunos perros mostraban una expresión de «amonestado», que los humanos interpretaban como una admisión de culpa.

Las mascotas que parecían más «culpables», según sus dueños, eran aquellas que habían sido reprendidas por algo que no habían hecho.

Los investigadores llegaron a la conclusión de que esa mirada o expresión de culpa es una respuesta al comportamiento humano y no tiene relación con las acciones del perro, o con la conciencia de haber roto alguna regla.

Tras este ejercicio, Alexandra Horowitz dijo que la percepción de los sobre los perros «es simplemente lo que quieren ver los propietarios». Para la investigadora, los seres humanos tienden a transferir sus ideas morales y comportamientos a sus compañeros animales, por lo que mientras más cerca y más tiempo pasan con ellos, más propensos son a este tipo de juicios.

Cara de Culpable ¿Mito o Realidad?

Los seres humanos tienden a transferir sus ideas morales y comportamientos a sus compañeros animales.